PARIS, Mar 7 (AFP) - Los "crímenes de los grupos paramilitares colombianos se han disparado" desde que comenzó el proceso de paz con el gobierno hace dos años, denunció el lunes en París el diputado y presidente del Polo Democrático Independiente de Colombia (coalición de partidos de izquierda), Gustavo Petro.
"Los paramilitares han expulsado a un 40% de personas más y han matado a casi 2.000 personas más en el último año. Estas cifras están disfrazadas en las estadísticas del gobierno, pero sus crímenes se disparan. ¿Cómo se explica ésto en medio de un proceso de paz?", se preguntó Petro.
Las negociaciones entre el gobierno y las Autodefensas Unidas de Colombia (AUC) consiguieron hasta ahora la desmovilización de unos 4.500 miembros de esta organización paramilitar y en 2005 se pretende completar el desarme de 20.000 hombres.
Pero para este responsable de izquierdas, el plan del gobierno para negociar y desmantelar a estas fuerzas paramilitares "no es verdadero" porque no cumple varias condiciones indispensables.
"En primer lugar, no rompe la relación entre paramilitares y políticos, sobre todo en el ámbito regional, donde el poder político ha desaparecido y se ha transformado en un poder mafioso, al estilo italiano", denunció.
Según el diputado, hay poblaciones enteras que no votan en las elecciones "forzadas por estos grupos que falsifican las actas", barrios enteros que son "extorsionados" por bandas armadas profesionales o núcleos de mineros, cafeteros, indígenas o campesinos "exterminados sin contemplaciones para robarles su riqueza".
"Actualmente, los paramilitares en Colombia controlan hasta la prostitución. Y sin duda son los principales exportadores de cocaína en el mundo. No digo el único, sino el principal", aseguró.
En segundo lugar, otra cuestión clave en esta negociación es la impunidad.
El gobierno colombiano preparó la semana pasada un proyecto de ley que estipula penas de cárcel de entre cinco y ocho años de cárcel para los paramilitares, lo cual fue considerado por organismos humanitarios como una legitimación de la impunidad.
Petro recordó en Francia que el Polo Democrático Independiente defiende una negociación estilo Sudáfrica, donde no se encarceló a los criminales del apartheid sino que se buscó con ahínco la verdad para que "produjera una catársis social".
"Nuestra prioridad es la verdad, porque el problema no es quién aprieta el gatillo sino quién da la orden. Para que no sigan actuando, estos responsables deben ser desenmascarados y tienen que hacer una confesión pública", pidió.
Al respecto, el diputado lamentó que el gobierno de Alvaro Uribe se oponga a estas confesiones públicas de los acusados e intente presentar otras soluciones más ligeras. "Es como si en Europa, la derecha y la izquierda unidas quisieran tapar los crímenes de Hitler", citó.
Por otra parte, Petro lamentó la actitud de Europa en la cumbre internacional celebrada en febrero en Cartagena de Indias (Caribe colombiano), en la que se mostró dispuesta a apoyar financieramente el proceso de paz con los paramilitares siempre y cuando sus delitos no quedaran impunes.
"Cuando acabó la cumbre, los paramilitares se burlaron de Europa, porque ellos no necesitan sus euros. Ya tienen millones de narcodólares", recordó Petro.
Según él, el miedo de estos grupos era que Europa presentara en aquella cumbre una propuesta para juzgar a estos paramilitares en tribunales internacionales o tribunales nacionales especiales.
"Con voluntad política ésto podría llevarse a cabo pero desgraciadamente, Europa no lanzó esta oferta, que sería esencial para lograr un verdadero pacto social en Colombia y un poco de la paz que tanto necesitan los ciudadanos, concluyó.

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